¿Qué se entiende por el concepto de "seducción rápida"?
La seducción no se basa en trucos incorrectos, ni en artes de magia, sino en técnicas reales donde todas nuestras habilidades personales son puestas en evidencias y aplicadas en función de lograr un fin, que puede ser tener una aventura, ganar amigos o conseguir una pareja. En este sitio se habla de seducción desde el punto de vista del hombre que desea mejorarse en el arte de conquistar a las mujeres.
El juego de seducción comienza como un antagonismo, un reto a ping pong o a poker donde gana el que saber darse el mayor valor. Este juego acaba a veces en el amor.
En qué consiste nuestro método
Nuestro sitio no es derivado del método Mystery, ni de otros métodos de los Picks Up Artists (PUAs), y tampoco de la programación neurolinguística (PNL), o del método speed dating de Ross Jeffries. Nuestro programa es anterior al método Mystery y si tiene influencias, estas vienen de David DeAngelo. A pesar de esta influencia, el 78% de los contenidos son fruto de nuestro trabajo personal y no proceden de ningún otro método.
Nosotros nos basamos simplemente en una idea muy sencilla: los hombres masculinos son más atractivos, de la misma manera que lo son las mujeres más femeninas. Esto es tan evidente que a menudo la gente lo olvida. Ser masculino en el caso del hombre es aún más importante. Contrariamente al reino animal, en el género humano, la belleza es mujer, los hombres no son "bonitos" y si atraen sexualmente es por otras razones. Por eso es que toda la belleza del hombre está en su mente y en su masculinidad.
Este sitio es original, pero al mismo tiempo no viene del planeta Marte y no ignora la realidad de los otros métodos, con los cuales tiene definitivamente cosas en común (esto sucede inevitablemente cuando varios métodos tienen el mismo objetivo), pero la diferencia está en el enfoque que se le da a las cosas: los métodos PUA tienen sus teorías de base y se basan en la seducción asistida por un coach. Nuestro método también tiene sus principios, algunos similares a los de los métodos PUA, otros propios y se basa en una seducción autónoma. Como en el entrenamiento físico, es la misma diferencia entre tener un entrenador que nos dirige en cada momento y seguir un plan hecho por un entrenador. Nuestro sitio corresponde al segundo caso (mucho más económico), aunque también se ofrece coaching por email gratuito para los miembros.
Si usted pudiera convertirse en una mujer durante 5 minutos y lograr sentir atracción hacia algún hombre lograría comprender todo lo que hace falta para seducir a las mujeres. Lamentablemente esto no es posible, por lo tanto el estudio de la seducción es también un estudio abstracto donde igualmente hay que ponerse en el papel de quien queremos seducir.
¿Por qué tanto afán con la originalidad?
Era hora que el lado cortante de algo no viniera siempre de fuentes anglo-estadounidenses. Nuestro método es 100% latino y es exquisitamente original.
Nuestro equipo apoya el hecho de que usted tiene una cabeza, con la cual tiene sus propios pensamientos, no le impone ideas de un americano que han dado la vuelta al mundo porque de ahí viene el poder. Pero lo más importante es que nosotros creemos firmemente en el hecho de que las mujeres tienen un cerebro, no son objetos sexuales y tampoco muñecas que se pueden manipular a nuestro antojo mediante truquitos ingenuos.
Este sitio ha sido pensado para todos aquellos que consideran que la seducción es ante todo un juego, luego un arte. Se basa en muchos estudios hechos de psicología femenina. Desde el año 2 A.C. el filósofo romano Ovido escribió su primer tratado sobre el amor. Pero mucho antes de volverse una teoría, la seducción siempre ha sido una preocupación constante para todos los hombres. Este programa constituye la referencia de todo lo que está conectado con el arte de seducir y sus dificultades.
Seducir es realmente comprender a las mujeres. Tener éxito depende también de cómo el hombre se siente consigo mismo, de cómo trasmite a través de su forma de ser y su lenguaje extra verbal. Y finalmente la personalidad hace todo el resto. Sin contar la influencia del aspecto físico, el prestigio y lo que tenemos. Todos estos factores entran en juego y hay que saber cómo gestionarlos. En pocas palabras, estamos hablando de cosas absolutamente concretas, que siempre han existido y que hacen la diferencia entre el arte de saber ligar, y la torpeza de los que con las mujeres no pegan un chícharo.
Seducir es también no cometer errores comunes. En este sentido es que nuestra seducción es rápida: permite llegar más rápidamente a los resultados porque nuestro juego es sólido y porque respecta la famosa consigna "vísteme despacio que voy de prisa".
Todo el mundo sabe cómo seducir hasta un punto, algunos saben más, otros menos. Pero lo que no es dirigido no progresa más allá de eso. Por eso es que si usted quiere ser un mejor seductor, debe aprender los principios de base de la seducción o no irá lejos. Esto es válido en todas las cosas de la vida, no sólo en el arte de seducir.
Los elementos que conducen al éxito con una mujer son relativamente pocos. Algunos de ellos están bajo nuestro control. Uno de nuestros refranes favoritos es: « Toma lo que tienes y haz de eso lo mejor que puedes ». Traduciéndolo en términos de seducción, esto significa que hay que considerar todos los elementos que están bajo nuestro control y explotarlos para aumentar al máximo nuestras posibilidades.
La seducción no es una ciencia exacta, cada mujer es un ser único y aunque las mujeres tengan más cosas en común que diferencias, no existe una táctica de seducción infalible que funciona con todas, sino sólo métodos que permiten acumular pequeñas ventajas hasta la conquista final de una mujer.
Muchos hombres no tienen ninguna idea sobre lo que las mujeres realmente quieren y se esfuerzan en conquistarla desde un ángulo totalmente equivocado logrando sólo resultar menos atractivos. El arte de seducir es la clave para no cometer estos errores nunca jamás.
Aprender la seducción no es gratuito y no estamos hablando de plata, sino de esfuerzo. Necesitará de mucho trabajo, pero valdrá el resultado final. Saber seducir es algo que no tiene precio. Si lo piensa bien, la seducción cambia totalmente la vida de un hombre y constituye la verdaera y única diferencia entre la frustración y la felicidad.
Ahora sabe que puede mejorar su capacidad de seducir mediante un trabajo dirigido y con nuestro programa, tiene un valioso instrumento a su disposición. ¡Pues, es hora de aprovecharlo!
