Las inhibiciones peligrosas
¿De cuáles inhibiciones estamos hablando? Con este término nos referimos a las inhibiciones que, la mayoría de las veces, limitan un hombre hasta el punto de impedirle un encuentro que podía haber sido exitoso.
Liberarse de los frenos para abordar a una chica
He aquí la lista de los frenos más comunes a la fuente de estas famosas inhibiciones:
- ¿Qué pasa si ella me rechaza?
- ¿Qué me pasaría si se supiera que he intentado seducir a aquella mujer sin éxito? ¿Se burlarían de mí? ¿Pensarían mal de mí?
- ¿Y si esta mujer estuviera felizmente casada?
- ¿Qué pasaría si, al tratar de seducirla, fuera tratado duramente al punto de destrozar el poco valor que me queda?
- ¿Qué pasaría si ella le cuenta a la gente sobre mi torpeza después de tratar de seducirla? ¿Qué pasaría si ella se ríe de mí en mi ausencia?
- ¿El intento compensaría los días de vergüenza e inseguridad que seguirían después de aquel "no"?
- ¿Y si después de dirigirle la palabra no se me fuera a ocurrir más nada que decirle?
- No me gusta ser ignorado o rechazado, si esto me pasa muchas veces no tendré más nunca el valor de probar de nuevo. Mejor sentirse seguro antes de intentar, así me expondré menos.
Cada uno de estos puntos merece una respuesta individual.
¿Qué pasa si ella me rechaza?
Nada. Uno de los peores errores que un seductor primerizo pueda cometer es considerar un rechazo como algo personal. El temor al rechazo y la ansiedad del resultado no deben jamás llegar al punto de bloquearnos totalmente. Uno de los objetivos de nuestro sitio es liberarse de estos temores.
¿Qué me pasaría si se supiera que he intentado seducir a aquella mujer sin éxito?
Tratar de seducir a una persona adulta de sexo opuesto es algo que no debería asombrar a nadie, hasta nuevo aviso. No es un crimen, ni una aberración, ni un tema que llama a la discreción. ¿Ha sido usted inoportuno o torpe? Es sólo un problema de experiencia, concéntrese más bien sobre la sinceridad de sus acciones. ¿Recuerda cuando le han preguntado, con tono preocupado, dudoso o desconfiante, qué intenciones usted tiene? Dígale exactamente lo que uste quiere, no la deje llegar al punto de preguntárselo. La amistad entre un hombre y una mujer es perfectamente posible, pero comporta un camino diferente con respecto al amor. Por lo tanto si usted quiere ser amigo de una mujer, nadie se lo prohíbe, compórtese como amigo. Sin embargo, si usted se siente atraído por ella, ¡cometería un grave error si se comportara de amigo! Y las razones de esto las explicamos hasta el cansancio.
¿Y si ella estuviera felizmente casada?
Entonces no le haría caso y le diría simplemente "no". Usted puede saber que está casada o no saberlo. Pero el hecho de querer seducir a una mujer casada no lo hace automáticamente responsable de su traición, primero porque usted no tiene porque conocer los detalles de su situación sentimental y segundo porque ninguna traición tiene lugar si la mujer no la permite. Y si ella consiente con usted, probablemente hubiera sido consensual también con otro, el problema ya existía antes de usted preocuparse al respecto. Una mujer felizmente casada no traiciona a su marido. Punto. Si lo hace es porque la parte del "felizmente" ya no existe en la ecuación y usted claramente no es la causa.
Claro siempre es necesario tener cierta ética, esto es parte integrante del prestigio personal. Un hombre inescrupuloso no inspira confianza, porque puede seguir siéndolo. Este aspecto es tratado con más detalle en nuestro artículo sobre la seducción de una mujer comprometida, de nuestra guía práctica de seducción.
¿Qué pasaría si me tratara duramente?
Ninguna mujer lo va a tratar duramente si usted ha sido amable y no ha sido grosero o vulgar. Si usted no es ofensivo, la gente no tiene razón de ofenderse, ni de ofenderle. Si ella lo ofende a pesar de todo ¡es un problema suyo no de usted! Para saber más acerca de este tema lea el artículo sobre la seducción de las mujeres difíciles, siempre de nuestra guía de seducción.
¿Y si ella dirá a los demás lo torpe que he sido?
¿Y entonces? Una mujer nunca se burlaría de un hombre que ha intentado seducirla y tampoco haría comentarios chistosos o negativos. Y si lo hiciera sería simplemente una estúpida y, una vez más, ¡sería su problema! Pero, normalmente, una mujer le hace caso o no le hace caso, nada más ni nada menos.
¿El intento compensaría los días de vergüenza e inseguridad que seguirán el "no"?
Para obtener lo que usted quiere en la vida, debe liberarse de la ansiedad del resultado. En principio ¡usted no necesita nada! Nunca se debe pensar en lo que sucede si fracasamos. Más bien piense en lo que sucede si tuviera éxito. Véase con esta chica en la cama, motivase antes de intentarlo.
¿Y si después que le dirijo la palabra no tendré más nada que decirle?
A lo mejor usted tiene poca química con ella y quizás en este caso ni siquiera valga la pena intentar seducirla. Ella puede ser muy guapa, pero si no hay química es poco probable que le guste al final. Además, si ella tampoco tiene nada que decir, es poco probable que se interese en usted y entonces ¿de qué vale seducirla? El hecho que ella converse con usted de manera fluida es seguramente una señal indicadora de interés, una de las varias posibles. En nuestro apartado sobre el lenguaje corporal, mencionamos este tema que también es tratado en nuestro programa.
Pero cuidado, no siempre la conversación carece de fluidez por falta de interés: también puede que se trate de una chica tímida, en este caso las dificultades de comunicación serán evidentes, pero no concluyentes y quizás encontrará útil leer nuestro artículo que habla de la seducción de las chicas tímidas.
No me gusta ser rechazado, por lo tanto tengo que sentirme seguro antes de lanzarme
Con prudencia excesiva no asegurará sus posibilidades. Al contrario, no actuar por inseguridad es algo que contribuye precisamente a reducir sus posibilidades. No es la prudencia que le permitirá sentirse seguro, sino la experiencia y el conocimiento. Si el verdadero seductor parece no fracasar nunca no es porque es capaz de seducir a cualquiera, sino porque sabe ver en sus posibilidades, sabe leerlas. Para seducir bien, pues, es esencial llegar a desarrollar esta visión y la única manera de lograrlo es frecuentar mujeres, ¡no abstenerse de hacerlo!
Reuniendo las ideas...
Vencer las inhibiciones peligrosas es esencial para progresar. Usted nunca traumatizará a una mujer sólo por haber intentado seducirla. Las mujeres están acostumbradas a ser acercadas por hombres de manera regular, esto no es algo que las asombra. A veces, tampoco es cuestión de seducir bien o mal. Puede perfectamente estar seduciendo bajo malas circunstancias o momentos inapropiados. Ya hemos visto que una mujer no es fácil o difícil todo el tiempo, sino que esto depende. Una mujer ¡nunca es la misma! Puede gustarle a algunas mujeres y no a otras, o puede llegar en un mal momento. Si una mujer lo rechaza, pase simplemente a la siguiente, el mundo está lleno de bellas mujeres que podrían responder positivamente a sus atenciones. Un día acabará por aceptar que no puede sentirse mal sólo por el hecho de no gustarle a todas.
Aprendiendo a ser audaz en la conquista e indiferente en el rechazo, ganará en habilidades y seguridad y si logra no temerle al fracaso, será entonces también más interesante, porque se sentirá más seguro.
Otra regla importante a considerar es que no hay éxito sin enemistad. El hecho de ser de una manera equivale a gustarle a algunas mujeres y no a otras. El éxito con algunas implica e impone el fracaso con otras. No puede hacer nada al respecto. ¡Trate simplemente de mantener su estilo de manera consistente, no se deje llevar por las preferencias femeninas, demuestre siempre buen gusto y sea siempre usted quien decide!